Hoy vamos a hablar de algo que nos ha sucedido a todos, pero a lo que muy pocas personas dan la importancia que se merece: los Momentos Evolutivos.
Un Momento Evolutivo es algo que sucede en nuestra vida, casi siempre inesperado, que hace que ésta tome un rumbo diferente o dé un salto hacia adelante.
Puede ser una persona que has conocido: alguien con quien te encuentras por casualidad, tal vez un profesor o un compañero, alguien a quien observas o quien, en un momento importante de tu vida, te da una clave importante.
Puede ser también una información que te llega en forma de libro, reportaje, programa de radio,…
O una conversación que escuchas por casualidad mientras vas en el autobús.
A menudo es una frase que dice alguien lo que hace que mi vida de un giro a mejor.
Se trata de esa oportunidad que la vida te ha brindado después de la cual ya nada vuelve a ser lo mismo. Puede ser algo que hace que veas la vida de otra forma, o que te des cuenta de golpe de algo de lo que no eras consciente.
Puede ser esa persona bondadosa que te ayuda en un momento en que lo necesitabas y no contabas con nadie.
O puede ser esa información de la que no tenías ni idea pero que te abre nuevas puertas.
Todas las personas han tenido a lo largo de su vida alguna experiencia, alguna vivencia que les ha marcado para bien, que les ha ayudado a dar un cambio en su vida y en su forma de pensar.
Hay quien dice que son casualidades afortunadas y hay quien piensa que las casualidades no existen y son parte de un proceso de evolución personal.
El problema está en que muchas veces, cuando se nos aparece uno de estos momentos, no somos capaces de aprovecharlo porque estamos distraídos, pensando en alguna de las muchas cosas que nos ocupan en nuestra vida cotidiana.
Hay personas que muchos años después siguen sufriendo por haber dejado pasar una de estas oportunidades. Y eso solo sirve para que, entre lamento y lamento, no sean capaces de apreciar los nuevos Momentos Evolutivos que la vida les ofrece.
Por eso es tan importante estar atentos a nuestro entorno.
Los romanos representaban a la Fortuna como una mujer calva, pero con un mechón de pelo en la frente. Esto era, decían, porque sólo podías agarrarla del mechón cuando pasaba por tu lado. Después ya era demasiado tarde.
¿Quién sabe? Quizás éste artículo sea el Momento Evolutivo de alguna persona.
Y tú: ¿Cuál ha sido el Momento Evolutivo de tu vida que más recuerdas?
Mi momento evolutivo sucedió hace un año….cuando después de haber obtenido el certificado de profesionalidad…una amiga me comentó de un puesto de trabajo en geriatria….el cuál acepté y de ahí fue todo un camino abierto…con mis correspondientes sacrifios……pero q aún tengo la esperanza no se vaya quedar en esto. Tengo la ilusión de hacer de este trabajo …algo más halla!!!☺