Si preguntáramos cuál es el lugar más mágico del mundo, seguramente la mayoría de las personas respondería que las pirámides o alguna catedral o algún monumento prehistórico, o quizás algún paisaje natural.

Nosotros lo tenemos claro: para nosotros el lugar más  mágico del mundo es una biblioteca.

Es donde puedes escuchar lo que tienen que contarte personas de todas las culturas y épocas.

Da igual que lleven 1000 años muertas, hablen en otro idioma, o sean grandes empresarios o maestros espirituales.

Tienes el privilegio de escuchar a  personas que buscan contarte algo, entretenerte, enseñarte o abrirte la mente a nuevos horizontes que ni siquiera imaginabas antes de abrir la portada del primer libro.

Pero hagamos la prueba, vayamos a una pequeña biblioteca y démonos un paseo al azar a ver qué nos dicen las voces de los libros:

Lo primero que nos encontramos es un autor italiano contemporáneo, Roberto Saviano que en su obra “Cero,Cero,Cero” nos habla de la importancia de la cocaína en el mundo moderno.

Un poco más allá me encuentro a un anciano chino, Sun Tzu, que me explica cómo debería hacerse la guerra en su mundo..

Seguimos caminando y nos encontramos con el ruso, Sergei Lukyanenko, que en su obra “Guardianes de la Noche”, nos abre las puertas de un mundo de magia, vampiros y la eterna lucha entre el Bien y el Mal.

Poco después oímos la voz de Séneca, el viejo romano que hablando con su sobrino Lucilio, le da consejos sobre cómo hay que vivir.

Un poco más allá el autor Philip Matyszak  nos cuenta en su libro “Legionario” cómo era la vida en el ejército romano hasta en los mínimos detalles.

Y en la siguiente estantería nos encontramos con un mundo desértico lleno de hombres salvajes armados con cuchillos y montados en gusanos: el mundo de Dune de Frank Herbert

No sabemos por cuál de estas obras decidirnos y nos encontramos con Paul “Coach” Wade,  un hombre que estuvo 16 años en la cárcel por tráfico de drogas, y en ella descubrió la pasión de su vida: el entrenamiento gimnástico, qué aprendió de otros presos.

Decidimos terminar el paseo ante las voces de miles y miles de autores que reclaman nuestra atención.

Hemos tenido acceso a la experiencia y conocimientos de personas muy diferentes, de distintos países y diferentes épocas sin apenas desplazarnos.

Esa es nuestra definición de un lugar verdaderamente mágico.

¿No te parece?.